En pleno pico de la ola de calor que está sufriendo nuestro país, y cuando las previsiones indican que Zaragoza llegará esta tarde a los 45 grados, queremos recordar los consejos, que desde el Colegio de la Arquitectura Técnica de Zaragoza hemos emitido en los últimos años, que permiten una mejora en la utilización de los edificios en verano y que pueden ayudar a protegernos del calor.
1.- Evitar que el sol entre directamente a través de los cristales de la vivienda.
El sol no debe entrar de forma directa a través de nuestros cristales. Cuando los rayos del sol atraviesan un cristal se produce el llamado efecto invernadero. Este es un fenómeno físico que produce una ganancia continuada de calor en el interior, debido a que la radiación solar penetra a través de un vidrio entra casi toda la energía, pero no deja que se escape casi nada de esta radiación.
Donde mejor se percibe este efecto es en el sobrecalentamiento de los coches en verano, pudiendo llegar a temperaturas elevadísimas de 60ºC, cuando en el exterior hay una temperatura de 35ºC.
2.- Aprovechar el momento del día cuando la temperatura exterior es menor a la temperatura interior para ventilar la vivienda.
Consiguiendo de este modo bajar la temperatura de la vivienda. Se recomienda sobre todo aprovechar las noches más frescas con viento para ayudar a enfriar la vivienda y que le cueste algo más calentarse en los días más calurosos.
3.- Encender el mínimo número posible de punto de luz o electrodomésticos.
Al tener encendida la iluminación y otros electrodomésticos, aumenta la temperatura desde dentro de la vivienda, ya que son cargas internas.
Sobre todo, se recomienda no utilizar el horno, la plancha u otros elementos de gran potencia. Así mismo, se aconseja abrir lo menos posible y descongelar los alimentos en el interior de la zona de frigorífico, para ayudar al mejor funcionamiento del compresor de la nevera.
Es conveniente recalcar que la iluminación led tiene una carga térmica muy inferior a otro tipo de iluminación.
4.- Poner el aire acondicionado a 26º C.
Recordar que la temperatura de consigna recomendada para el aire acondicionado en verano es de 26 ºC, (Tb. recogida en el RITE) y que a partir de ahí cada grado que bajemos además de aumentar el riesgo de sufrir algún catarro u otra enfermedad, estaremos aumentando el consumo de energía un 8%.
5.- Usar ventiladores u otros elementos que generen corriente interna de aire.
Recomendamos el uso de ventiladores. Si generamos corrientes de aire en el interior de la vivienda, mejoramos la evapotranspiración del cuerpo y la sensación térmica es algunos grados más baja. También es recomendable para terrazas el uso de refrigeración evaporativa. Con pequeños ventiladores que vierten pequeñas gotas de agua. Al evaporarse roban calor al ambiente, ya que necesitan energía para pasar de estado líquido a estado gas. De esa forma rebajan sensiblemente la temperatura del ambiente.
6.- Evitar realizar actividades que aumenten la humedad de la vivienda.
La humedad es otro parámetro importante que en verano en cantidades altas puede provocar sensación de disconfort. Se recomienda evitar actividades que generan aumento de humedad, como cocción de largo tiempo, planchado con vapor en el interior de la vivienda, etc.